[Autores: Leonor Massanet / Víctor J. Sanz]
De la misma manera que los medios sirvieron para justificar la agresión contra el pueblo libio mediante el bombardeo informativo de unos supuestos bombardeos que el líder libio habría llevado a cabo (contra su propia población!) y que nunca han sido suficientemente demostrados; ahora, tras el “éxito” de la “misión democratizadora” de la Comunidad Internacional consistente en un asedio sistemático, incluyendo bombardear hospitales y escuelas[1] o en bombardear a la población civil con gas mostaza[2], la misión de los medios consistirá en destruir cuantas pruebas queden en pie de los avances que el pueblo libio consiguió de la mano de su supuesto tirano[3] en muchos aspectos sociales y que harían sonrojar a buena parte de los países llamados “desarrollados”. Lo que en muchos países occidentales no pasa de ser un ‘derecho constitucional’[4], en Libia, de la mano de Gadafi, era un hecho universal, educación (y libros) gratis, electricidad gratis, atención sanitaria gratuita y universal (incluyendo intervenciones en el extranjero), pleno empleo, banca pública, medios de producción al servicio de Sigue leyendo